Tribuna Campeche

Diario Independiente

Vulneran derechos de menores al ser obligados a trabajar

“El Sistema del DIF Estatal Campeche tiene identificado la fuerte problemática de la vulneración del derecho que tienen los niños de vivir sin tener la obligación de trabajar, porque esa es la parte que duele, y aunque es un fenómeno pequeño, no podemos permitir que siga creciendo”.


Afirmó lo anterior el director general Mario Rafael Pavón Carrasco, y aclaró que niños en situación de calle no hay, “todos regresan a sus casas pues tienen donde quedarse y donde dormir”.


Entrevistado en torno a la situación de niños que tienen o son obligados trabajar, y si los programas del DIF hacen lo suficiente para apoyar a disminuir esa situación, el funcionario puntualizó que “los programas sí funcionan y se encuentran en su máxima capacidad de atención”.


Niños en situación de calle en Campeche no hay —aseguró—, hay niños, y eso sí es un hecho, que salen a la calle a trabajar con sus padres, o que en un determinado momento son utilizados para trabajar literalmente, incluso solos, y todos, pero en su inmensa mayoría regresan a sus casas, tienen donde quedarse, tienen donde dormir.


La problemática más fuerte es que se vulnera el derecho que tienen los niños a vivir una vida sin tener la obligación de trabajar, y esa es la parte que duele, reconoció.


Aseguró que en los diversos recorridos que como Sistema Estatal DIF hemos realizado, tanto en colonias como en el centro de la ciudad, el malecón, en los parques, y en aquellos lugares donde se presentan este tipo de situaciones, hemos conminado a los padres que su obligación es trabajar, pero que no incluyan a los niños por ningún motivo, situación que los hace vulnerable.


También encontramos muchos casos, cuando los padres de familia al no tener donde dejar a los niños o quien los apoye, los llevan como una especie de acompañamiento y cuidado, lo entendemos y lo comprendemos, pero hay otros casos que hemos visto, donde literalmente los niños trabajan y regresan a donde están los padres, siendo vulnerados sus derechos.


Tenemos identificado el fenómeno y coincidimos con la Procuraduría de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes de que el fenómeno es pequeño, pero definitivamente no podemos permitir que siga creciendo.

¡Comparte esta nota!