La gobernadora Layda Elena Sansores San Román debería estar en la cárcel por corrupción y desacato, luego de que en la Alcaldía Álvaro Obregón presuntamente saqueó las arcas públicas, en contubernio con su parentela, y aquí se ha dedicado a pisotear la ley y sentencias de jueces federales, aseveró el activista político Álvaro Omar Chiquini Cu.
Y subrayó: “En Campeche no hay obras ni programas sociales, sólo un Gobierno saqueador y corrupto obsesionado por el revanchismo político, la persecución, el acoso y la represión. No se trabaja por los campechanos”.
Con Layda Sansores y su partido, el Movimiento Regeneración Nacional (Morena), un presunto protector de narcomenudistas que operaba en la Ciudad de México encabeza a la legión extranjera corrupta: el chilango Erick Alejandro Reyes León, que tras su llegada a Campeche incrementaron la violencia, la delincuencia y los robos.
Chiquini Cu aseguró que en la Alcaldía Álvaro Obregón están las denuncias por el saqueo de cientos de millones de pesos a cargo de Layda Sansores, operado con la pandilla de delincuentes que ahora tiene en cargos de primer nivel en la Administración estatal, pero la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum Pardo, la encubre porque la gobernadora le sirve como palera para hacer el trabajo sucio.
“Si Layda Sansores no está en la cárcel es porque Sheinbaum Pardo la protege. Hay pruebas contundentes de su corrupción, en que estaría implicado su sobrino Gerardo ‘Seso Loco’ Sánchez Sansores, y quien ostenta como vocero oficial del Gobierno de Campeche, Walther David Patrón Bacab”.
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