Tribuna Campeche

Diario Independiente

Clausura SEIN curso con una caminata y desayuno “a ciegas” 

Destacó la participación de jóvenes interesados en aprender a escribir e interpretar el Braille.

Vendados de los ojos, sólo con un bastón como guía y tomados de los hombros, los participantes recorrieron varias calles del primer cuadro de la ciudad hasta llegar al parque de San Martín. 

Con una caminata por el Centro Histórico y un desayuno “a ciegas”, la Secretaría de Inclusión (SEIN) clausuró ayer un curso de escritura y lectura en Braille, en la que participaron personas con y sin condición de discapacidad visual, a fin de concientizar a las y los empresarios campechanos sobre la importancia de contar con menús y señalética en este lenguaje, y a la ciudadanía en general a respetar los espacios destinados a este sector.

Vendados de los ojos, sólo con un bastón como guía y tomados de los hombros, los participantes recorrieron varias calles del primer cuadro de la ciudad hasta llegar al parque de San Martín, para “ponerse en los zapatos” de quienes no pueden ver, y vivir los retos a los que se enfrentan día a día dentro de la sociedad.

Patricia León López, titular de la dependencia, destacó la participación de jóvenes que cursan la licenciatura en educación, interesados en aprender a escribir e interpretar el Braille para poder aplicar estos conocimientos si, cuando ejerzan su profesión, les toca atender a algún alumno con esta discapacidad, pero sobre todo sintieron qué significa estar en una condición de discapacidad visual.

“La experiencia tenía qué ver con que los edificios del Centro Histórico tienen para hacer lectura en Braille y canaletas para que puedan utilizar personas con discapacidad visual, y fuera un poco la vivencia del cierre del curso”.

Y enfatizó la importancia de comenzar a acostumbrar a la gente a respetar los espacios donde estas personas caminen, cuando vienen con el bastón o con un monaguillo, y señaló que también vendrán turistas con esta condición, y la ciudadanía debe saber cómo actuar.

El curso concluyó con un desayuno “a ciegas” en conocido restaurante de la ciudad, donde los participantes leyeron y ordenaron con menús en sistema Braille 

¡Comparte esta nota!