“La marcha de miles de campechanos fue un llamado al diálogo, no con un ánimo de confrontación”, aseveró el coordinador parlamentario del PRI, Ricardo Medina Farfán.
El Gobierno de Morena —apuntó—, sólo ha generado más agravios y no soluciones al conflicto de seguridad.
El clamor de justicia de los campechanos, que incluso ha trascendido a nivel nacional, es que los policías sean escuchados y el diálogo privilegiado, luego de la grotesca forma de llevar a cabo un operativo fallido por las autoridades de Seguridad, que puso en riesgo la vida de mujeres y hombres en el penal de Kobén.
“Es momento de que la autoridad tienda puentes y genere acciones para resolver el problema, que lleva ya más de 96 horas, pues no hay diálogo real, atención puntual, y lejos de ello buscan a través de la simulación hacer creer que todo está resuelto”.
Muestra de la simulación, agregó, es la burda forma de colocar logotipos de la policía a personas ajenas a este trabajo, en publicaciones para hacer creer que los policías aceptan sus condiciones para dejar de luchar, y más ahora luego de que el pueblo se ha levantado y quiere que Marcela Muñoz dejé el cargo, ante su falta de capacidad para combatir la inseguridad.
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