En Guatemala, el Congreso aprueba la ley que especifica que las niñas, podrán contraer matrimonio a partir de la mayoría de edad, así como en la gran parte de los países de la región. Ya que hasta ahora las niñas se casaban a las 14 años.
Después de un mes de la aprobación de esta ley los activistas dicen que costará mucho más esfuerzos para lograr el cambio cultural tan arraigado, sobre todo en las comunidades mayas de esta región, «será un verdadero desafío».
“Es un paso realmente importante”, dijo Christa Stewart, de la organización Equality Now, a la Fundación Thomson Reuters en una entrevista telefónica. “Pero implementar completamente la ley requiere de un cambio cultural, de jueces entrenados y de llegar a las áreas remotas”.
Tanto activistas, como trabajadores sociales esperan los mejores resultados con respecto a que prohibición ayude a disminuir las tasas altas de embarazo en mujeres adolescentes y el abandono escolar femenino. Aseguran los grupos de derechos humanos que esta práctica cultural tan arraigada priva a las niñas de muchas oportunidades además que las expone a la violencia doméstica, sexual al contraer matrimonio con hombres mayores.
La agencia de Naciones Unidas para la Protección de la Infancia (Unicef) estima que un siete por ciento de las niñas guatemaltecas están casadas a los 15 años y un 30 por ciento antes de cumplir los 18.
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