Comer comida chatarra una que otra vez no tiene nada de malo, sin embargo, que este sea tu estilo de vida es caminar hacia una muerte lenta y dolorosa.
Y eso lo sabe perfectamente bien Alisysha McNair, una joven de 21 años que llegó a pesar 170 kilos durante sus 17.
Según con información de medios locales, fue víctima de bullying durante mucho tiempo. Lo peor llegó cuando un día casi se ahoga bebiendo un refresco.
“Estaba desesperada por cambiar. No podía seguir ninguna dieta. Después de ahogarme un día bebiendo un refresco, tuve que esforzarme por recuperar el aliento, me di cuenta que se trataba de morir o cambiar”.
Por consiguiente, inició un tratamiento médico y se inscribió a un gimnasio. Poco a poco comenzó a notar pequeños cambios en su cuerpo, que pronto se transformaron en cambios radicales.
Al terminar el tratamiento, McNair inició un curso para convertirse en entrenadora personal y así poder ayudar a quienes pasan lo mismo que ella.
“Me siento y me veo completamente diferente, y he decidido convertirme en una entrenadora para ayudar”.
Te dejamos unas fotos de su increíble transformación:
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https://www.instagram.com/p/BtCAyPrANwX/?utm_source=ig_embed
https://www.instagram.com/p/BsYYhvmAcHj/?utm_source=ig_embed
https://www.instagram.com/p/BtRn3q4DlPP/?utm_source=ig_embed
https://www.instagram.com/p/BtEVEcgAOWf/?utm_source=ig_embed
FUENTE: EXCELSIOR
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