DAKAR (Reuter).— Yihadistas mataron a 132 civiles en varios ataques contra aldeas en el centro de Malí durante el fin de semana, informó ayer el Gobierno, en los más recientes incidentes en medio de una situación de seguridad que se deteriora.
Miembros del grupo islamista Katiba Macina asaltaron al menos tres aldeas de la comuna rural de Bankass, en la región central de Mopti, en la noche del sábado, dijo el Gobierno en comunicado.
“El total de muertos es de 132 civiles y algunos de los autores han sido identificados”, añadió.
Malí lucha por frenar una insurgencia islamista que se arraigó tras un golpe de Estado en 2012, y que desde entonces se ha extendido desde el árido norte del país africano.
Miles de personas han muerto y millones han sido desplazadas en toda la región del Sahel. Algunos de los grupos tienen vínculos con Al Qaeda y el Estado Islámico.
La insurgencia también se ha extendido a los vecinos Burkina Faso y Níger, a pesar de los esfuerzos internacionales liderados por Francia para sofocarla.
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