Regresan peregrinos a sus comunidades

HECELCHAKÁN.— Antorchistas guadalupanos por devoción y fe enfrentan adversidades naturales como el clima y los accidentales para cumplir sus promesas a la Virgen de Guadalupe.
En esta ciudad a diario pasan decenas de peregrinos a hacer su visita a la iglesia o descansar, durante sus recorridos de regreso, después de haber visitado a la Virgen de Guadalupe en la Ciudad de México.
Cada año, Hecelchakán es centro de encuentro y cruce de centenares de personas devotas que vienen de diversas partes de la Península de Yucatán, para venerar a la madre de México.
Durante estos meses de noviembre y diciembre se ha podido apreciar grupos de feligreses hasta el día 12 de diciembre, que arriban en bicicleta, caminado, corriendo, en mototaxi y en grupos.
Armando Che Pool, devoto de la comunidad de Dzitas, Yucatán, expresó, procuran llegar a su destinos.
“Estamos expuestos a muchas cuestiones que no están en nuestras manos, pero nos encomendamos a Dios”, manifestó.