HOPELCHÉN.— Aunque hasta el momento no hay mortandad de ganado por falta de pasto y agua, los jagüeyes están totalmente secos. Alrededor de siete mil cabezas de ganado podrían morir por el calor en la región.
Así lo dio a conocer Jorge Mario Pool Novelo, secretario de la Asociación Ganadera Local de Hopelchén.
“El gremio tiene 130 socios y unas siete mil reses en registro. Si no llueve lo necesario los siguientes días, los animales empezarán a morir, lo cual será muy lamentable”, abundó.
Hopelchén tiene bastante agricultura y se produce mucho forraje. Ayuda a que el animal se mantenga vivo, pero no soluciona la falta de agua para mejorar la comida. Por ello cada vez bajan más de peso y se echarán hasta morir.
“La escasez de pasto verde y agua causa muchas enfermedades en las reses por exceso de calor”.
Llevar a las praderas al ganado para que coman en los potreros no tiene caso, se acabarán el poco pasto sembrado y que está seco.
“Tardará de dos a tres meses para que el ganado se recupere. Hasta el momento no hay muertes de animales, pero si no llueve seguramente las habrá”.
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