Pablo es engañapende…: Ermilo May

Mantiene rezagada a la Península de Atasta, reprochó

El alcalde Pablo Gutiérrez Lazarus es un “engañapende… y engañabob…”, y en su cara le he dicho que sólo llegó a repetir en el cargo para seguir robando, mientras que a la Península de Atasta la mantiene rezagada, reprochó su presidente Ermilo May.
Es la triste historia desde que llegó en 2015-2018, porque todo se lo lleva al Carmen y no da nada para los poblados, y no es que esté en contra de Pablo sino que existen muchas injusticias, aseveró.
De qué sirve que Alejandro Casarín, cuando estuvo de presidente del Congreso le haya aprobado presupuesto histórico, si sólo dio 45 millones de pesos anuales para las tres juntas municipales, lamentó el morenista.

De las dadivas que reparte Gutiérrez Lazarus, mencionó, “también puedo comprar 100 pollitos a 10 o 15 pesos para repartirlos y acuso que tengo un millón de pesos, por eso le dije que no ching…, de qué sirve si se van a morir porque no tenemos como mantenerlos”.
A Pablo le restregué en la cara lo que es, por eso no me quiere y me marginó. A mí como presidente de la Junta Municipal de Atasta sólo me ha dado una audiencia, relató.
“Pero cuando estábamos en la elección pasada a cada rato me hablaba, por eso le recalqué que sólo vino a robar y no le gustó, porque no tengo pelos en la lengua, y le exigí que le dé lo que le corresponde a la Península”.
Capufe, continuó, también le da dinero al Ayuntamiento por la caseta de cobro, pero resulta que ésta no está asentada en Carmen sino en terrenos de la Península de Atasta.
“Del recurso anual que me dieron fue de 12 millones de pesos, pero de ahí me descuenta 250 mil pesos cada mes por el seguro, el IVA, el ISR y no sé qué tanta put… mad… más, y no da ni un apoyo extraordinario como lo hacía el PRI”.

A los expresidentes le daban 60 mil pesos por extraordinario, más 40 mil de combustible y 10 mil por recolecta de basura, pero a mí nada, porque esa partición de la gasolina se lo queda, explicó.
Al DIF de Atasta le dio 60 mil, pero al de su mamá le destinó 60 millones de pesos el año pasado. A la Península nada más da pañales, panecitos y la despensa que llevan a las cocinas económicas de las escuelas, recriminó.
Hay un comisario que me dice que por hablar mal del alcalde me va mal, pero no es así, sin embargo, no me voy a arrodillar, si Gutiérrez Lazarus da un buen presupuesto se lo aplaudo, concluyó.