Alerta por medusas y los peces “raya”

Tras los reportes de ataques de medusas y peces “raya” o “tun” en algunas playas de Campeche, la Secretaría de Medio Ambiente, Biodiversidad, Cambio Climático y Energía (Semabicce) invitó a la población a ser precavida al momento de ingresar al mar, y ante lesiones, conservar la calma y evitar la automedicación.

Este viernes, usuarios de las redes sociales nuevamente advirtieron de la presencia de dichas especies marinas, que desde hace 15 días se han acercado demasiado a la orilla de las playas.
En Playa Norte en Ciudad del Carmen, casi 30 personas, entre niños, jóvenes y adultos, recibieron atención médica por la picadura de medusas, o llamadas coloquialmente “aguas malas”; ninguno ameritó traslado.

Por otra parte, un usuario dio a conocer que en la playa San Lorenzo le sucedió algo igual, pero en este caso fue por un pez de la especie “raya”, que con su cola le picó un tobillo, lo que inmediatamente le provocó sangrado, ardor, dolor e hinchazón, por lo que llamó a los bañistas ser precavidos.

Al respecto, la titular de la Semabicce, Angélica Lara Pérez Ríos, dijo tener conocimiento de la situación, y recomendó a la población en general adoptar medidas preventivas antes de entrar al agua de mar.

Reconoció que a diferencia de años anteriores, aumentó el avistamiento de medusas y peces “raya” muy cerca de la orilla de las playas, posiblemente en busca de alimento, y en el caso de las medusas, por los cambios de temperatura del agua de mar, pues al no haber tantas lluvias aumenta la salinidad.

De avistarlas, sugirió no tocarlas y alejarse de la zona donde se encuentren para evitar sus picaduras, que pueden provocar afectaciones en la salud, las cuales dependerán del organismo de la persona.

Entre los síntomas que se presentan por la picadura de las medusas pertenecientes al grupo zoológico de los Cnidarios, y de los peces “raya”, destacan el fuerte dolor e hinchazón, por lo que será necesaria la atención médica para una revisión y tratamiento debido.

Por otra parte, exhortó a respetar a los manatíes en caso de avistarlos, no tocarlos, y sobre todo, no montarlos, porque aunque son animales dóciles, curiosos y juguetones, pueden cambiar su temperamento.