Con algunas modificaciones al proyecto original avalado en febrero de este año por el Senado, la Cámara de Diputados aprobó por unanimidad una nueva versión de la Ley Silla, para que los trabajadores tengan derecho al descanso en un asiento durante la jornada laboral, y en un espacio específico.
Aunque es proyecto nuevo, la reforma avalada en la Cámara Baja retoma parte del dictamen anterior que tuvo como eje principal la propuesta presentada por la ahora diputada federal Patricia Mercado (MOCI), pero en San Lázaro no se siguieron los trámites para que su discusión continuara.
Por eso fue impulsada de nueva cuenta ahora por el diputado Ricardo Monreal, y suscrita por las y los coordinadores parlamentarios del PAN, PVEM, PT, PRI y MOCI.
Se destacó que se busca establecer la obligación de los patrones a proveer el número suficiente de asientos o sillas con respaldo, a disposición de todas las personas trabajadoras en los sectores de servicios, comercio y centros de trabajo análogos, para la ejecución de sus funciones o para el descanso periódico durante la jornada laboral. Además, mantiene la restricción a las empresas de obligar a los trabajadores a permanecer de pie la totalidad del horario laboral.
El principal cambio aprobado es que los centros de trabajo deberán tener área específica para el descanso de los empleados, y esta disposición “se observará en los establecimientos industriales cuando lo permita la naturaleza del trabajo”.
En ese sentido, la reforma sigue dirigida principalmente a los establecimientos de servicios, comercio y análogos.
Se proyecta incluir en el reglamento que los periodos de reposo durante la jornada laboral sean obligatorios, así como las normas que regulen el derecho de las personas trabajadoras a usar los asientos o sillas con respaldo.
Esta iniciativa, que reforma y adiciona los artículos 132, 133 y 423 de la Ley Federal del Trabajo, y que también suscriben las y los coordinadores parlamentarios del PAN, PVEM, PT, PRI y MOCI, en materia del derecho al descanso de las personas trabajadoras durante la jornada laboral, contempla adecuaciones de lenguaje con perspectiva de género.
En tanto, los plazos de transición permanecen sin cambios respecto al primer proyecto, por lo cual una vez que la reforma sea publicada en el Diario Oficial de la Federación (DOF), las empresas tendrán 180 días para cumplir con las nuevas disposiciones.
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