En medio de la espiral de violencia en la entidad, crisis en el campo, conflictos sociales por invasiones de tierras y el declive de la economía, la gobernadora Layda Elena Sansores San Román desapareció de la faz pública, tras protagonizar su show del Martes del Jaguar.
Como es costumbre de Sansores San Román, durante la semana se la pasa ausente por viajes improductivos, que en nada son benéficos para los campechanos, y sólo regresa a Campeche cuando produce su patético programa al estilo talk show del Martes del Jaguar, un escaparate que sólo ha servido para la burla nacional.
En esta semana no se ha reportado ni informado de alguna actividad pública de la mandataria que no sea su Martes del Jaguar, aunque la Unidad de Comunicación Social del Gobierno del Estado, a cargo de Walter David Patrón Bacab, boletinó una información en el que supuestamente Sansores San Román estuvo presente en la sesión de la Mesa de Seguridad y la Paz, pero al parecer con fotografías de archivo y presidió un acto de la Secretaría de Salud (SSA).
Lo que sí fue un hecho es que la noche del martes acudió al Palacio de Gobierno, donde está montado el set de su programa producido por su sobrino Gerardo “El Seso Loco” Sánchez Sansores.
Al concluir la transmisión del Martes del Jaguar, Sansores San Román huyó cual delincuente para no dar la cara a los transportistas que la esperaban a la salida del sótano, para reclamar el anarquismo que su Gobierno ha fomentado en el sector transportista, en complicidad con el Instituto Estatal del Transporte (IET), que parece elefante blanco.
Desde la noche del martes no se ha tenido información de Sansores San Román. No ha vuelto a aparecer en algún acto público, ni ha dado a conocer reuniones privadas, ni siquiera de sesiones de la Mesa de Seguridad y la Paz.
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