Margina a los pobladores por el conflicto político
Pablo Gutiérrez Lazarus la trae contra mí desde que asumí el cargo de comisario de Nuevo Progreso, principalmente porque no era su preferido, y al menos en dos ocasiones ha ordenado que me detenga su policía municipal, señaló Vicente Ovando.
Nunca le he caído bien, sobre todo porque cada grupo tiene su gente preferida. Desgraciadamente desde que gané siempre ha estado así, por eso sólo ayuda a quienes de alguna manera están con él, lamentó.
—Pero qué le ha hecho al alcalde para que tome esas decisiones y en su contra.
—Aquí en el pueblo tenemos un pin… cab… que le dicen José Augusto Luna Valencia, mejor conocido como “Chico” Luna, es como el chismoso, y de lo que se entera en las comunidades se lo comunica al edil.
“Entre las cosas que le dice al presidente municipal es que el comisario no está trabajando, tiene basura en el pueblo, se dedica a estar embriagándose, que le digo que es homosexual, que es “xotito”, entonces, todo eso le llenó el buche de piedritas”.
De su reciente detención explicó, “vino la patrulla a buscarme, aunque no se animaron a entrar a la Comisaría, sino esperaron a que saliera para interceptarme con el pretexto de que me acerque a llamarles la atención porque el chofer de camión cervecero obstruía el paso con sus maniobras”.
—¿Es la primera aprehensión en su contra?
—No, ya son varias veces, siempre la han traído conmigo, pero claro, por órdenes de él.
Si eso me hace siendo autoridad en el pueblo imagina cuando no lo sea, tendré que estar encerrado en mi casa. Hay dos gentes que no quiere en la Península de Atasta, una se llama Ermilo y el otro soy yo, relató.
“Siempre ha tenido diferencias con nosotros. Bueno, a mí el coraje que me tiene es porque soy amigo de Ermilo, no sé si en alguna ocasión han escuchado que sólo nos hemos dedicado a beber cervezas”.
Ya Ermilo dejó de visitarme en mi hogar, casa de ustedes, pero igual ya la traía contra nosotros. Y las veces que he pedido auxilio a la directora Samanta Bravo, siempre me lo ha negado, expuso.
—Y si Pablo repite tres años más, ¿Qué pasará con ustedes?
—Pues seguiré aquí, aunque estamos marginados por él, porque sólo beneficia a sus amigos y a sus conocidos, en cambio aquí, son dos o tres.
Igual me criticaron que debo de dejar de organizar a los pobladores y que soy un plantonista. En mi caso, yo no los obligo ni incitó para que hagan protestas, refutó.
El pueblo fue el que me puso y el pueblo me va a quitar, así que lo único que lograron hacer es meterme a la cárcel, cobrarme la multa para recuperar mi libertad, concluyó al relatar las embestidas que recibió de Gutiérrez Lazarus.
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