Es instrumento de santificación
Con el llamado a considerar la enfermedad como un proceso de purificación, pues sólo así se hará más ligera la carga, el vicario del Santuario de San Francisco de Asís, Efraín Jiménez, pidió a los enfermos no molestarse con sus cuidadores para que éstos puedan ser también instrumento de santificación para los demás.
En misa por los enfermos, destacó que “a veces cuando una persona lleva una vida alegre, apenas llega la enfermedad, esa felicidad se transforma en tristeza, enojo e ira, porque vemos la enfermedad como un castigo o el término de nuestra vida”.
Sin embargo, se debe considerar la enfermedad como un instrumento de santificación. Como dice Job, si aceptamos de Dios lo bueno, las bendiciones y los momentos felices, igual hay que aceptar lo malo.
El dolor, el sufrimiento y la enfermedad están presentes; la causa del dolor del hombre es el pecado original y por eso se padecen tribulaciones, pero podemos entender la enfermedad como proceso de purificación.
El cura pidió permitir que el Señor entre a nuestras vidas y ayude a cargar esa cruz pesada cuando existe un padecimiento.
“Si Dios permitió la enfermedad en nuestras vidas, no es castigo ni es por culpa de nuestros pecados, es porque quiere que la enfermedad nos santifique”.
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