Tiro de gracia al Carmen

Atentar una vez más contra la economía del Municipio del Carmen, como pretenden los diputados federales y senadores de Morena, del PT y del Partido Verde es de alta traición…

La iniciativa de ley que plantea que Petróleos Mexicanos (Pemex) y la Comisión Federal de Electricidad (CFE) podrían “desaparecer” sus multimillonarias deudas, bajo el argumento de “inviabilidad financiera”,  va a ser el tiro de gracia para la languidecida economía de la isla más bella del Golfo de México.

No podríamos esperar que los diputados federales y senadores por Morena se opongan a esa propuesta de la presidenta Claudia Sheiunbaum, que, en aras de sanear financieramente a ambas paraestatales, también propiciarán la muerte de miles de empresas, negocios, restaurantes, hoteles, proveedores, constructoras, etcétera, que desde hace dos años están mendigando que les paguen por los servicios prestados a Pemex.

Se entiende la desesperación de los genios financieros de la 4T para tratar de ahorrarse varios cientos de miles de millones de pesos, y con ello intentar una vez más rescatar a Pemex y a la CFE, que se ratifican como auténticos barriles sin fondo. Lo que no se entiende es que aquellos que despotricaban contra los políticos neoliberales, contra los burócratas que desde la comodidad de un escritorio arrasaban con la economía de los más pobres, ahora estén haciendo lo mismo, y peor, con la complicidad de esos representantes populares que prometieron ser “diferentes”.

El análisis financiero de esta propuesta dará mucho de qué hablar, de qué escribir, de qué discutir. Lo que no se vale es que se lleven entre las patas a la economía de toda una comunidad que durante varias décadas fue también el eje desde donde se financió el desarrollo del país.

Atentar una vez más contra la economía del Municipio del Carmen, como pretenden los diputados federales y senadores de Morena, del PT y del Partido Verde, es de alta traición.

Así les pagan a esos ingenuos, cándidos votantes, que durante los últimos 12 años, han sufragado masivamente a favor de los candidatos de la 4T. Esos  crédulos ciudadanos carmelitas que han sido el fiel de la balanza para inclinar las más recientes elecciones en Campeche —ellos le dieron el triunfo a Layda Sansores hace tres años y ellos mantuvieron para Morena la mayoría legislativa en el Congreso local—, ahora cosecharán los frutos de haberse dejado convencer por unos cuantos pesos, o a cambio de fantasiosas promesas.

¿Se espera que la nefasta gobernadora Layda Sansores, el inútil alcalde carmelita Pablo Gutiérrez Lazarus, alguno de los diputados federales, senadores o diputados locales de Morena se opongan a esa mortal decisión que acabará con la economía isleña? No. Al contrario, van a querernos disfrazar ese golpe funesto contra la Isla, como una decisión patriótica, al estilo de aquellas “decisiones dolorosas pero necesarias”, de las épocas del PRI.

Qué poca memoria de los morenistas. Qué poca madre.