¿ENTONCES FAMILIARES Y AMIGOS NO HICIERON NADA?
Luego de que vecinos y amigos de Joel del Carmen “Choco” Acosta Orama, el niño que había desaparecido desde el pasado sábado en Río Blanco II, en el Municipio de Palizada, se organizaron para recorrer durante días diversos tramos de ranchos aledaños y rastrear huellas de uno de sus perros, ahora el Gobierno de Layda Sansores se adjudica la ubicación y rescate del menor.
Lo anterior, además de ser una falta de respeto representa una burla a los familiares y amigos, quienes desde el aviso de la desaparición se dieron a la tarea de buscar al pequeño de 9 años de edad.
Por si fuera poco, la alerta Ámber fue activada apenas ayer jueves, es decir, tuvieron que transcurrir cinco días para que la Administración de Layda Sansores mostrara atención en este caso, que por fortuna terminó con la aparición del Choco sano y salvo.
Además, agentes policiacos de la guanajuatense Marcela Muñoz tuvieron la osadía de publicar fotos en redes sociales donde se ve al menor en la cama de un hospital, lo que recibió críticas. ¿Y los derechos humanos de Joel?, ¿quién les dio permiso, o quién se los ordenó?
¿Pensarán la gobernadora Layda Sansores y la jefa policiaca Marcela Muñoz que los campechanos, pero sobre todo los paliceños, creen que el rescate del niño fue gracias a la Comisión Local de Búsqueda de Personas del Estado de Campeche?
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