DZITBALCHÉ.— Ciudadanos confrontaron a los elementos de Seguridad Pública por la forma en que llevan a cabo sus actividades, donde los acusaron de no estar cumpliendo con los protocolos para la detención de personas.
Y es que cerca de la una de la madrugada de ayer, 10 oficiales arrestaron a ciudadano durante baile y presuntamente lo cargaron esposado para llevarlo hasta las afueras de la parroquia de la Asunción, pero al no tener patrulla pidieron el apoyo de la Guardia Nacional que llegó casi 30 minutos después para su traslado a la comandancia de Calkiní.
De acuerdo con los pobladores, el hombre era acusado de alterar el orden público, pero la verdadera razón de su arresto fue porque no estaba consumiendo cervezas en el evento sino que compró en otra parte y luego ingresó.
El retenido gritaba de dolor al estar sometido por dos agentes, lo que originó que en determinado momento, varios recriminaron que había abuso de autoridad y no le leyeron sus derechos, entre otras irregularidades que piden que se indaguen.
Debido a la tensa situación, cerca de 20 elementos resguardaron perímetro de unos cuatro metros, incluso trataron de entorpecer la labor de los medios de comunicación.
También pidieron el apoyo a los policías estatales, quienes indicaron que los encargados de llevarlo a los separos serían los municipales y sólo prestarían el vehículo.
Sobresalió que los patrulleros se negaron a identificarse o mostrara sus placas, pues al parecer carecen de la misma.
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