Wadea Al Fayoumi, un niño palestino-estadunidense, fue asesinado por el arrendador de su casa como respuesta a la última escalada de violencia entre Israel y Hamas
CHICAGO, (Agencias).- La policía del condado de Will, en los suburbios de Chicago, acusó a un hombre de 71 años por cometer un delito de odio al apuñalar mortalmente a un niño de seis años, y herir gravemente a su madre, una mujer de 32 años, alegando que señaló a ambas víctimas por su fe islámica, y como respuesta a la más reciente escalada de violencia entre Israel y Hamas.
La noche del sábado 14 de octubre, Joseph Czuba tocó la puerta de la unidad que le rentaba a Hannan Shanin, madre de la víctima. Al momento de abrirle, Czuba comenzó a estrangularla y a atacarla con un cuchillo.
Shanin pudo liberarse del atacante y corrió al baño a llamar al 911; esos breves momentos bastaron para que el hombre encontrara a su hijo, Wadea Al Fayoumi, y lo apuñalara 26 veces, causándole la muerte.
Según un comunicado del Consejo de Relaciones Estadunidenses-Islámicas de Chicago, en los mensajes de texto que Hannan Shanin envió al padre del niño desde el hospital tras la agresión, ésta afirmó que el propietario gritó “ustedes, los musulmanes, deben morir’”, al momento de atacarla.
La organización de defensa de las libertades civiles de los musulmanes calificó el crimen como “su peor pesadilla”, y reportó un preocupante aumento de las llamadas y correos electrónicos de odio desde el estallido de violencia en Medio Oriente.
Czuba fue acusado de asesinato en primer grado, intento de asesinato en primer grado, dos cargos de crimen de odio y agresión con agravantes con un arma mortal.
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