COMUNA PERMITE A MOTOTORTILLEROS HACER LO QUE QUIERAN, DICE
“Una súplica” para que hagan valer el Reglamento de Molinos y Tortillerías del Municipio de Campeche expresó el secretario general de la Unión de Productores de Masa y Tortilla, José Pedroza Camacho, quien se apostó frente al Palacio Municipal, y acusó que le siguen permitiendo a los motorrepartidores “hacer lo que quieren, perjudicar a la industria que paga impuestos, y nos llevan al cierre de nuestros negocios”.
“Esta protesta es para pedirle a la alcaldesa de Campeche, Biby Karen Rabelo de la Torre, que aplique el reglamento aprobado hace poco con el consentimiento de todos los industriales de la masa y la tortilla, y que ya es ley”.
Y refirió que el reglamento establece que un mototortillero no puede acercarse a 250 metros de una tortillería que no reparte, que no tiene motos, y recordó todos los escritos que ha mandado a la autoridad municipal, los cuales al parecer no le hacen llegar.
El dirigente expuso que entregó escritos diversos donde expone su difícil situación, y que no podía pagar sus impuestos, por lo que pidió una prórroga, “pero al parecer no lo leyeron, no está enterada la alcaldesa, y ahora hay problemas en los que está en riesgo el empleo de 15 personas, todos ellos de la familia”.
Doblado por la difícil situación, con la voz entrecortada y a punto de las lágrimas, el vetusto líder tortillero externó: “Ayer dije que no podía llorar, y ahorita se me quiebra la voz… porque la situación es grave para nosotros”.
Relató que la propietaria de una tortillería, con lágrimas comentó en asamblea ante 28 dueños de ese tipo de establecimientos que quiere que den resultado las reuniones con la Alcaldía de Campeche, porque incluso se ha corrido el rumor de que está a punto del quiebre, y los grandes acaparadores del negocio le quieren comprar.
Sin proporcionar nombres, asentó que “hay tres acaparadores que pagan y que son, al parecer, premiados por la Comuna de Campeche, la dueña de la tortillería se llama Pilar Chan Cahuich, y lo grave es que está en una situación difícil, pues incluso está enferma, no tiene ni para comprar sus medicamentos”.
“Es penoso –enfatizó–, porque tiene jóvenes estudiando, pero además Erick Lezama me amenazó con que de seguir denunciando, clausuraría mis tortillerías, y cumplió en parte porque mandó a cortar el agua que tenemos en la de Presidentes de México”.
Pedroza Camacho precisó que en el caso de los impuestos, “las tortillerías deben pagar de acuerdo a los kilos que venden diario, o sea, si comercializan 12 kilos, entonces pagarán 12 pesos diarios de agua, y las que venden más de 500, las que tienen motos, deben tributar eso mensual de agua y de basura”.
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