Tribuna Campeche

Diario Independiente

“Primero los pobres” es una falacia, afirma la diputada Toledo

El México de “primero los pobres” es una falacia, un slogan de campaña utilizado por el Ejecutivo Federal para llegar a ese segmento de la población, y si bien hay programas orientados a un grupo importante como el de adultos mayores, hay gran contrariedad entre este beneficio que siempre ha existido y ha mejorado y la desconsideración con la falta de medicinas para este sector tan vulnerable con padecimientos crónicos.
Sentenció lo anterior la diputada Karla Toledo Zamora, presidenta de la Comisión de Salud de la LXIV Legislatura, y criticó también el desabasto de medicinas en hospitales desde hace años a raíz del desmantelamiento del sistema de salud, la falta de médicos y el alza de precios en productos básicos.
Otro ejemplo claro de la mentira de “primero los pobres”, es la comercialización de la vacuna contra el Covid-19 de Pfizer, aprobada el pasado 7 de este mes por la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), desde ayer en las principales cadenas de farmacias en el país, a razón de 850 pesos aproximadamente.
Pero ¿qué pasa si usted es de escasos recursos?, pues tendría que recibir la que adquirió el sector salud para esta etapa de inmunización. Claro, siempre y cuando la encuentre en el hospital al que acuda, aunque sea de la que al día de hoy no ha recibido el aval de la Organización Mundial de la Salud, aunque sí de la Cofepris, criticó.
Hay que destacar que tampoco habrá vacunas gratuitas para todos los mexicanos, sino sólo para los 24.5 millones que el Gobierno considera como población de riesgo, cuando en los gobiernos anteriores era primordial que el esquema de salud lo recibieran todos los mexicanos.
Con esto —subrayó—, nos damos cuenta que habrá mexicanos de primera y de segunda, al igual que con el Tren Maya, pues sólo quienes tengan dinero podrán adquirir los boletos y el resto del “pueblo bueno y sabio” no podrá subir a toda su familia por el costo.
Lo lógico —aseveró Toledo Zamora—, hubiera sido adquirir las mejores vacunas para la población de riesgo, para no caer en la discriminación o la diferenciación entre los mexicanos, pues lo que transciende es la salud de los ciudadanos y no las afinidades ideológicas con los países donde se producen las vacunas.

¡Comparte esta nota!