RATA PASEADORA

No se puede presentar como una luchadora de izquierda o decir que para su Gobierno ‘primero los pobres’, cuando es ella la que se ha dado lujos y derroches en estos pésimos tres años de Gobierno…

“Mientras que a los damnificados por las intensas lluvias, a los pescadores que tienen bajas capturas por las vedas, y a las familias vulnerables les regala una despensa de 50 pesos, la Tía Rata Fifí tiene el descaro de presumir sus ostentosas comilonas en restaurantes exclusivos de Madrid, España, todo con cargo al erario estatal”, despotricó sumamente irritado don Memín mientras lustraba los zapatos  de don Julián

La tarde apenas caía, de manera que don Julián se dio tiempo para bolearse los botines, con los que acude a la misa dominical en la Catedral junto con su esposa. “Son sitios muy frecuentes para la hija del Sátrapa Negro; es clienta asidua de los restaurantes más exclusivos de la Ciudad de México, y en todas las ciudades que visita siempre come en los mejores restaurantes, tiene dinero para eso y más”, comentó.

—“¡Cómo no va a tener dinero la vieja rata si su papá se robó hasta la tierra de las uñas de los campesinos, las campesinas y las campesinitos,  y no se hable del tremendo saqueo que ha encabezado en estos tres años de su pésima Administración!”, respondió molesta doña Chela, quien confesó que a ella le tocó una despensita de tres pesos de las que repartió la Momia Guanajuatense para tratar de congraciarse con el pueblo que la repudia.

—“Dice una sabia conseja que no se debe comer carne delante de los pobres —intervino el poeta Casimiro— y no se puede presumir ser parte de un grupo de luchadores de izquierda, o tener como slogan de Gobierno ‘primero los pobres y para los pobres lo mejor’, cuando quien se está dando la gran vida es la senecta mandataria que no sabe gobernar, pero ¡cómo pasea la condenada!”.

Don Memín mostró la fotografía que se difundió en redes sociales, en donde se ve a la senil gobernadora comiendo, junto con su familia, en el restaurante “Ultramarinos Quintín”, del barrio Salamanca en Madrid España. Un sitio exclusivo, caro y reservado para fifís. “Pues no se le ve tantita vergüenza en la foto, al contrario, parece que disfruta darse esos lujos a costa del pueblo. Para eso luchó durante 24 años, para llegar al poder y derrochar a manos llenas”.

—“Lo que da rabia es que a su regreso a nuestras tierras se disfrace de indígena, inicie sus discursos o presentaciones diciendo algunas frases en maya, y presuma que su Gobierno le da preferencia a los pobres. ¡Que se lo crea su abuela! No es más que una farsante que nos engañó una vez, pero que ya no nos volverá a engañar. Han sido tres años de paseos, de pleitos, de lujos para ella y su familia, pero de sobras y migajas para el pueblo. ¡Es una vieja sinvergüenza!”, exclamó doña Chela, sumamente indignada.