Tribuna Campeche

Diario Independiente

La sociedad quiere hacerse un lugar en la vida pública: Xóchitl ciudadana

Sergio Aguayo Quezada

El día en que registró su candidatura, Xóchitl Gálvez dijo que se sentía “muy respaldada por los ciudadanos”, que nunca había sido “parte de las estructuras partidistas” y que le agradecía al PAN haberla arropado pese a su independencia. ¿Qué significado tienen estas palabras en el contexto político actual?
El ejercicio importa por encuestas como las de El Financiero de la semana pasada. El lunes, advirtió sobre la caída en el interés ciudadano hacia las “corcholatas” (de 52 a 47 puntos); el martes, que Xóchitl Gálvez ya adelantaba a Santiago Creel por 22 a 16 puntos; y el miércoles, que si la elección fuera ahora la senadora se llevaría 30 por ciento y Claudia Sheinbaum 41.
Alejandro Moreno —responsable de las encuestas citadas— me comenta telefónicamente que está encontrando indicios de que la senadora sí le quita votos a la base electoral de Morena. Otros indicadores cuantitativos le permitieron a Salvador Frausto hacer tres afirmaciones en un texto publicado por Milenio el viernes 21: Gálvez “acaparó los espacios más destacados de los medios de comunicación”, “ninguna ‘corcholata’ le hizo sombra” y ocupa el “primer lugar en las búsquedas de Google”.
Así pues, la novedad veraniega ha sido la senadora independiente. En tanto sabemos si se mantiene, crece o marchita, regreso a las afirmaciones iniciales porque apuntan a la profunda brecha que hay entre los partidos y la sociedad.
Las encuestas confirman que las mayorías ciudadanas son los “ninis” de la democracia (ni respetan ni confían en los partidos); otras evidencias permiten afirmar que abundan las organizaciones civiles intentando incidir en los asuntos públicos.
Los partidos impiden esa participación por lo redituable de su control oligopólico sobre la vida pública. Han tenido que hacer concesiones por su debilidad frente al movimiento encabezado por el Presidente. Y uno de los ejemplos más nítidos es la senadora independiente. Hace unos meses se dudaba de que el PAN la dejara ser la candidata opositora a la jefatura de Gobierno capitalino, en la actualidad encabeza la lista de quienes aspiran a la Presidencia.
Para entender lo que pasó regreso al 2022, año de la ofensiva presidencial contra el Instituto Nacional Electoral. La sociedad organizada reaccionó convocando a dos grandes marchas en noviembre de 2022 y febrero de 2023. En diciembre, Guillermo Sheridan difundió su investigación sobre el presunto plagio cometido por la ministra Yasmín Esquivel Mossa, la favorita del Presidente para presidir la Suprema Corte. La 4T, y el Presidente, todavía rumian su derrota.
Entretanto, los partidos opositores se negaban a una consulta que permitiera la participación de candidatos ciudadanos independientes. En mayo de este año, dos líderes del Frente Cívico Nacional, Guadalupe Acosta Naranjo y el senador Emilio Álvarez Icaza, decidieron impulsar desde esa organización unas primarias abiertas a ciudadanos, e invitaron a 11 personas sin partido a formar una Comisión Electoral Independiente que funcionó durante el mes de junio. Como integrante de esa comisión constaté el enorme interés que despertó el ejercicio en medios de comunicación y sociedad.
Ante ello, y para diferenciarse de la estrechamente controlada competencia entre “corcholatas”, los partidos opositores modificaron su negativa y aceptaron una consulta abierta a ciudadanos independientes.
En ese momento crearon una nueva organización integrada por siete ciudadanos independientes y seis representantes de partidos. Ellos están organizando la consulta en curso. Ante la flexibilización de las reglas y el entusiasmo que empezó a despertar su candidatura, la senadora decidió entrar en la competencia.
Imposible anticipar el desenlace de un enfrentamiento que se desplaza en varias dimensiones y velocidades. Xóchitl Gálvez adquiere fuerza pese a la hostilidad presidencial y a la desconfianza de los partidos. Resiste por el respaldo de organizaciones cívicas y una franja ciudadana. Llegará un momento en el cual aflorarán las contradicciones entre las fuerzas que están forjando la nueva arquitectura institucional.
Falta tiempo para eso; por ahora transitemos por una contienda hecha atractiva por el impacto de una personalidad carismática y una sociedad decidida a hacerse un lugar en la vida pública.

Colaboró Jorge Araujo.
@sergioaguayo

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