En las Tripas del Jaguar: 30 de septiembre de 203

DECISIÓN EMPRESARIAL DE LAYDA.

Para muchos debió pasar inadvertida la compra de casi 33 millones de pesos en 560 mil balas, 350 cámaras de solapa, 220 chalecos antibalas, 76 cascos, 149 radios portátiles y 161 armas cortas para los elementos policiacos. Si aquí no pasa nada, como dice la autoridad estatal, ¿para qué tanto armamento? ¿Qué hay detrás de tanta compra de equipo de seguridad?

Dicen los que saben que la gobernadora Layda Sansores condicionó la compra de los equipos de seguridad al consorcio Águila, de Tamaulipas, a la adquisición y sostenimiento del equipo de béisbol Piratas de Campeche, cuyos accionistas campechanos fueron obligados a vender la franquicia a los propietarios de esa empresa de armamento.

Se quejaba la mandataria de que antes el Gobierno mantenía al equipo, pero hoy lo sigue haciendo a través de la compra de armamento y municiones. ¿Qué cambió? En realidad, sólo los accionistas de la franquicia, que al final del sexenio venderán o mudarán el equipo a otra plaza más redituable, si les dejan de comprar sus productos. ¡Qué gran empresaria es la señora!

MÁS MENTIRAS DE LAYDA.

Informó la gobernadora en su pasado Jaguar que recibió a comisarios, agentes y presidentes de las Juntas del Municipio de Campeche. Según el vocero Felación Herrera, “se quejan de que no son escuchados ni atendidas sus peticiones, pero hoy la gobernadora y la secretaria de Bienestar van a planificar las obras cercanas a sus pueblos”, a lo que doña Corrupta replicó: “Queremos que ellos hagan las propuestas”.

¿Para qué si no va a hacer nada? Y si mentimos, que nos diga ¿qué obra les ha hecho en los dos años de su nefasto Gobierno? Ninguna. Ni siquiera los había atendido, hasta ahora. Y mañosamente no acordó realizar ninguna obra o acción con ellos, sólo “los va a incluir para planificarlas”. ¡Pasumecha qué gran avance! Critica sola lengua larga que el Ayuntamiento capitalino no hace nada, pero ella tampoco. ¿No le da vergüenza?

Como es su estilo, Layda le dio atole con el dedo a los representantes de las Juntas Municipales, como acostumbra, para dejar pasar más tiempo sin hacer nada. Lo mismo hizo cuando se reunió con los pescadores, les lloró que no dejará morir la pesca, pero no ha hecho nada para ayudarlos, mas que darles despensas. ¿Esa es su gran estrategia para reactivar al sector? Por eso estamos jodidos.

TROPEZÓ CON SU LARGA LENGUA.

En ese segmento en que la gobernadora habló de su reunión con los comisarios, los agentes y los presidentes de las Juntas del Municipio de Campeche, doña Corrupta se aventó un cantinflesco discurso en el cual tropezó con su enorme lengua y se metió tremendo autogol.

“Que vengan de allá para acá (las propuestas de obras), es lo que ellos quieren, porque normalmente se hacen desde el escritorio y se hacen los programas y ahí te va este camino, pues si este ni lo necesito, está cerrada la calle, por así decirles, entonces sí queremos que hagan las propuestas y efectivamente, es una ventanilla (el Ayuntamiento) donde nadie te escucha, ellos sienten la impotencia, no pueden hacer nada, es más fácil ver a Dios que a un gobernador (muy, muy, pero muy cierto, ella vive viajando) o a un secretario (¿a cuál si se van tras ella?). Que estemos cerca de ellos creo que es un aliento”.

¿Cerca como con la gente de Escárcega que le pidió cumplir con la Universidad Tecnológica que prometió en campaña, y no los recibió? ¿Cerca como los concesionarios campechanos del transporte público a los que se negó a atender cuando rodearon su camioneta en Palacio de Gobierno? No creemos que eso les haya dado aliento alguno. ¿Tendrá un mejor ejemplo?