Es decisión del pueblo participar en Carnaval

Aun cuando se busque mantener la cultura y tradición de un pueblo, no se debe perder de vista la necesidad de privilegiar la vida, sin embargo, el tema resulta ser tan controversial, que al final la decisión de participar en el Carnaval está en la propia ciudadanía.

Señaló lo anterior Juan Pablo Valadez Zavala, titular del Decanato de Carmen, al indicar que en estos momentos la religión católica está enfocada que con  la llegada del miércoles de ceniza, inicie la preparación para los tiempos de Cuaresma y convocar a la población a una nueva conversión.

Después de que el pasado viernes con la coronación del rey Momo “Jahn I”, en Carmen arrancó oficialmente el Carnaval, pese al exhorto de la comunidad médica y diversas organizaciones que pidieron al Ayuntamiento evitar convocar, la Iglesia pidió mesura en la población.

El tema es muy controversial pues tiene diferentes aristas desde donde puede analizarse la viabilidad de su desarrollo, sin embargo, ante condiciones sanitarias adversas, lo único que es válido es privilegiar la vida y no tiene por qué soslayarse.

“Si lo vemos desde el punto de vista de la cultura, pues es algo que está muy arraigado en nuestra sociedad o pueblo, desde el punto de vista de la fe, es un acontecimiento que no comulga al 100% con la religión católica”.

“Entonces, nosotros como Iglesia invitamos a acercarnos a Dios en estos momentos e iniciar el proceso de conversión, sobre todo en ese tiempo de Cuaresma”, dijo.

Si se realicen o no todas las actividades relacionadas con el Carnaval la Iglesia fijó postura y dijo, al final no es una decisión de las religiones, sino de quienes concurren a estas actividades a sabiendas de las circunstancias y del problema que representa la actual pandemia.

“De cualquier manera todas esas circunstancias, es como una moneda que se lanza al viento, si haces porque hicieron, si no hacen porque no hicieron, entonces, siempre vamos a encontrar los pros y los contras ante una circunstancia que va a ser muy difícil de analizar”, dijo.

Lo importante de todo que siempre tenemos que hacer una invitación a las personas y a cada ser humano a cuidar su salud. No son tiempos para desafiar a una enfermedad que ya costó muchas vidas en todo el mundo, sostuvo.

“Somos respetuosos de las autoridades, pero a nuestros feligreses les decimos que se cuiden, porque nada justifica poner en riesgo su integridad física. Creemos que ya habrá tiempo para disfrutar de otras situaciones, porque en este momento la pandemia no cesa”, explicó.

Ya viene el tiempo de Cuaresma, para intensificar el camino de la propia conversión. En el cual se supone cooperar con la gracia, para dar muerte al hombre viejo que actúa en nosotros, concluyó.