Prevalece tráfico de plazas en Casa de Justicia

El tráfico de plazas que prevalece en la Casa de Justicia es responsabilidad de la jueza primero familiar oral, Chuiná del Carmen Jiménez Zavala, porque permite que en su juzgado la carrera judicial quede estancada, debido a que las plazas vacantes son ocupadas por personas sin experiencia, preparación y bajo un contrato temporal.

Consideró lo anterior el presidente del Frente de Abogados Jóvenes de Carmen, Humberto Ortega García, al acusar también al jefe de Recursos Humanos, Noé Arias Acosta, quien inclina la balanza hacia el sexo femenino, para satisfacer sus intereses personales.

Un ejemplo de lo que ocurre en esa área del Tribunal Superior de Justicia del Estado Campeche (TSJE), es la contratación de actuarias sin experiencia, con contratos efímeros, quienes además desconocen los procedimientos del nuevo sistema oral familiar.

Para muestra, donde existe inconformidad del personal que viene haciendo carrera judicial, ocurre con el caso de la licenciada Shirley Sabido Gutiérrez, actuaria, quien no cuenta con plaza, está bajo contrato y ocupa un lugar donde encaja un oficial secretario de base, que si tiene la experiencia judicial, a diferencia del conocimiento que emplea la funcionaria, resaltó.

Además Sabido Gutiérrez, cobijada por la jueza Chuiná del Carmen Jiménez, viene del antiguo sistema penal, y se incorporó a un área familiar oral, que es desconocida por ella, lo que va en detrimento del trabajo que hacen varios litigantes, dijo.

Una actuaria debe desarrollar en apego a derecho, notificaciones, embargos, y otras funciones propias de la materia, sin embargo, con la inclusión de funcionarios como Shirley Sabido, se retrasan las secuelas procesales, lo que desencadena la inconformidad de quienes litigan en el mencionado juzgado, enfatizó.

Además de la responsabilidad de dicha jueza, el titular de Recursos Humanos, Noé Arias, bloquea al personal que tiene experiencia laboral, y que con sus años de carrera en Casa de Justicia, deberían ocupar el cargo de actuario, explicó el litigante.

A decir de Ortega García, hablar de ilegalidades donde se imparte justicia, pone entredicho el trabajo que viene desempeñando la presidenta del TSJE, Virginia Lezama Centurión, quien desde que asumió el cargo decidió separar a su hijo, para evitar el tráfico de influencias, lo que no imitan la jueza Jiménez Zavala y Noé Arias.

No quiero pensar que el arribo de mujeres a cargos de ese tipo, se deban a favores sexuales y caprichos personales, de quienes están a cargo de la contratación de proponer y contratar al personal, especuló.

Denunciar ese tipo de actos no atenta contra la autonomía del Poder Judicial, sino que busca hacer justicia a quienes durante muchos años “picaron piedra” para escalar posiciones, pero ahora se enfrentan alas preferencias de la juez y ojo “perverso” en recursos humanos.