Tribuna Campeche

Diario Independiente

En las tripas del jaguar: 06 de abril de 2023

MIEL EXCESIVA. Hasta los oficialistas Frentes Políticos del Excélsior criticaron la vergonzosa conducta de la mandataria, y le recordaron que su trabajo es gobernar y atender la problemática de Campeche, no andar de servil y ridícula animadora lanzando alabanzas por un tren que ni se va a terminar, ni se sabe si funcionará y traerá beneficios. Resumimos:


“…Súbete al tren, guerrero jaguar, cantaban en el video, mientras Layda lo llamaba ‘hermano Andrés’ y le decía: ‘No olvides nunca cuánto te ama tu pueblo’… la mujer olvida que su trabajo es gobernar, no ser la porrista oficial del Presidente… debería enfocarse en solucionar los problemas de su Estado en lugar de cantar loas. Su labor va de trabajar por el bienestar de la ciudadanía. ¿Y en cuentas claras cómo va, gobernadora?…”.


Para que no se queden con la duda los Frentes Políticos, en cuentas va reprobada. No transparenta, no informa, y lo poco que se hace público, no cuadra. Tampoco gobierna, porque generalmente no está, y por ello no trabaja por el bienestar ciudadano. Es un fracaso. Eso sí, está saqueando igual que lo hizo su padre hace seis décadas.

DE DRA. LAYDA A MRS. LA-IDA. La columna de Gil Gamés titulada “Psiquiatría”, publicada en Milenio, habla del “culto a la personalidad y la psicosis” por los halagos y elogios de la gobernadora al Presidente, para los cuales “los psiquiatras tienen la palabra… y sus medicinas”. Y receta: “Adminístresele a la paciente Layda Sansores 2.5 gramos de Quetiapina cada 6 horas, poderoso antipsicótico. Si no ceden las alucinaciones, se recomienda terapia electroconvulsiva y reposo indefinido”. Y analiza:
“El caso de Layda Sansores debe ser supervisado por un equipo de psicoanalistas y psicoanalistos… es una mujer muy carenciada, la ausencia del padre en su niñez desportilló su Yo y lo volvió un submarino conducido por el Ello de donde salen peligrosos torpedos narcisistas. Del Superyó, mejor ni hablamos, se desvaneció cuando la madre le descarapeló la ilusión edípica: Layda, nunca serás bailarina. Y ella decidió entonces el camino de la política. Éste grupo colegiado recomienda más bien el camino de la psiquiatría para esta paciente border, en el límite, víctima de alucinaciones”.


Gil Gamés incluso recomienda a los periódicos incorporar a su plantilla a dos psiquiatras para analizar las locuras, delirios, demencias y alucinaciones de los protagonistas de la 4T. En TRIBUNA ya tenemos al nuestro para entender la acentuada psicosis de la gobernante, que al igual que Dr. Jekyll y Mr. Hyde, pasa de Layda a La-ida en un abrir y cerrar de ojos.

NO HUBO JAGUAR. Dice la gobernanta que por respeto a la Semana Santa no hizo su programa familiar del Jaguar. Miente. Oculta que salió oootra vez de viaje, para irse a su casa en la capital. Con cinismo acusa que Lía Limón no vive en la Álvaro Obregón, y ella ¡tampoco vive en Campeche!
No tuvo la residencia legal necesaria para ser gobernadora, no vive aquí, vaya, ni sus vacaciones pasa en Campeche. ¿Miente o tuvo otro ataque psicótico?

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