No apoya la Sader a los apicultores

El secretario de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader), Víctor Villalobos Arámbula, minimizó la crisis que enfrenta el sector apícola por la mortandad de abejas en más de cinco mil colmenas registradas en comunidades mayas de la entidad, y sostuvo que “las pérdidas no son significativas”.

Por esa circunstancia descartó participar en la implementación de un programa emergente o entregar apoyos extraordinarios a los productores para hacerle frente al problema.

Pese a que en comunidades de los Municipios de Hopelchén y Campeche se acrecienta la preocupación e incertidumbre entre los apicultores, debido a que continúa registrándose la muerte de abejas, que de no ser controlado podría llevar a la extinción, Villalobos Arámbula admitió que no prevén acciones para mitigar la crisis.

Las autoridades de la Sader en Campeche buscarán llegar a un acuerdo con los productores para que puedan coexistir, porque son interdependientes, indicó. Necesitamos de la abeja para polinizar, y los productores necesitan controlar sus enfermedades y plagas.

Villalobos Arámbula expuso que la muerte de las miles de abejas en más de cinco mil colmenas, “no es tan significativo”, y que las pérdidas que resiente la actividad es por la baja producción a causa de la sequía.

Las pérdidas no son por las muertes de las abejas, sino por la sequía, porque no hay floración. Cuando se tenía floración y lluvias adecuadas se estaba produciendo el doble. El problema no es la muerte de las abejas, el problema es la sequía, recalcó, para justificar la ausencia de consideraciones y apoyos.

No se trata de una situación extraordinaria. Por eso no serán apoyados los productores que resientan afectaciones por el envenenamiento de las abejas, ni se implementará algún programa emergente para atender esta situación.

Los apicultores que buscan apoyo tendrán que esperar el programa de donación de abejas reinas o colmenas, que ejecuta la Coordinación Nacional de Ganadería en la segunda mitad del año, aclaró.
Luego de que autoridades de Senasica confirmaron que la muerte de las abejas fue provocada por envenenamiento, por el uso de pesticidas para combatir plagas y ante la denuncia de los apicultores de falta de regulación y vigilancia en el manejo de agroquímicos dañinos para la abeja, Villalobos Arámbula deslindó a la Sader del problema.

Saber, recalcó, no es la instancia o dependencia responsable de atender el tema del uso de pesticidas, insecticidas o cualquier químico que se emplea en la actividad agrícola.

Argumentó que la crisis en la apicultura en la entidad no es general. “Lo que ha venido ocurriendo es que están usando insecticida por medio del agua, que la abejas al tomar el líquido contaminado se envenenan, pero esto es un caso particular. Lo que necesitamos es una buena coordinación, porque perfectamente pueden convivir la apicultura con la agricultura.

Por otra parte, indicó que una de las prioridades del Gobierno Federal es estimular la producción de maíz y chigua, y señaló que impulsan acciones en el tema zoosanitario en la actividad pecuaria.

Lo que se busca es que todo el Estado cuente con la certificación y regrese a la zona para exportar ganado a Estados Unidos, en beneficio de los productores, ya que permitirá aumentar los canales de comercialización e incentivar la producción. Se donará a los ganaderos 120 sementales para seguir trabajando en la mejora genética, prometió.