Consulado de México en Texas solventó el servicio aéreo funerario.
José Neymar regresó a Ciudad del Carmen la mañana de ayer, a 10 días de haber fallecido en Texas, Estados Unidos, por complicaciones a consecuencia de las quemaduras en más del 90 por ciento de su cuerpo, tras el incendio de su vivienda en el Fraccionamiento Maderas a finales de abril pasado.
Alrededor de las 10 de la mañana, el cuerpo del pequeño de nueve años arribó en la carroza de la Funeraria Akal, cuya sala de velación ubicada en la calle 47, fue adornada con globos blancos y azules, así como carteles de recibimiento a “BbNey” por parte de familiares y amigos.
A la llegada de la carroza venía Juana Heredia Hernández, madre de José Neymar, quien dijo que luego del fallecimiento de su hijo el pasado 10 de mayo, tuvo que realizar diversidad de trámites para regresar a México.
Explicó que desde el 26 de abril cuando fue trasladado al Shriners Hospital for Children en Galveston, Texas, ella solamente contaba con un permiso especial para su estancia en dicho país.
Agradeció todas las muestras de cariño y apoyo de la comunidad carmelita, pero también de otras partes del país y de Texas, pues durante su estancia de más de 10 días en esa localidad norteamericana, nunca dejaron de orar por la recuperación de José Neymar, pero igual le brindaron ayuda económica para su manutención.
Resaltó que el pasado 10 de mayo, cuando ocurrió un tercer paro respiratorio que le arrebató la vida a “BbNey”, inició todo el proceso para poder retornar a Ciudad del Carmen y gracias al Consulado de México en Texas, fue que logró obtener la documentación no sólo para ella, sino también para solventar todo lo referente al servicio aéreo funerario. El Consulado le dio 150 dólares en efectivo.
Dio a conocer que el vuelo salió de Texas hacia el Aeropuerto Internacional de Quintana Roo, hasta donde llegó la carroza de la Funeraria Akal y en las primeras horas de ayer emprendieron regreso hasta la Isla. Todos esos gastos, así como la cremación, fueron donados por la empresa de Enrique Akal, a la que dijo no tiene más palabras que sean de agradecimiento.
Juana Heredia, dijo sentirse agradecida con la Fundación Michou y Mau, el personal del Shriners Hospital for Children en Galveston, Texas, a los familiares de otros pacientes quemados, quienes hicieron que su estancia se sintiera acompañada en un momento muy doloroso en su existencia.
Recordó que tras el accidente registrado el lunes 24 de abril, perdió a su hijo Juan Manuel de 11 años y tres semanas después la vida le quitara a José Neymar de nueve años.
Por ahora Juana Heredia dijo no tener fortaleza para regresar a su vivienda, en la que su madre Margarita, su hermana, primas, familiares, vecinos y amigos, han tratado de colaborar para recuperar su hogar, sin embargo, por el momento no lo hará, ya que no soportará el dolor tan grande de saber que en ese sitio perdió a dos de sus hijos.
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