No aceptarán negociación que atente contra intereses de trabajadores: Magaña
Las autoridades universitarias encabezadas por la rectora, Sandra Laffón Leal, condicionan al Sutunacar, al no conceder jubilaciones a cambio del pago de un bono por la revisión que se realiza, aun cuando ese recurso se encuentra considerado dentro del Presupuesto 2023.
Así lo dio a conocer Ramón Magaña Martínez, secretario general de ese gremio, quien señaló que las negociaciones de los 28 puntos que integran el pliego petitorio, han sido acordados en su mayoría, encontrándose entrampados en el tema del bono por revisión contractual, donde las autoridades universitarias quieren pagar menos de lo aportado en el año anterior.
La Unacar pretende que ese bono por revisión contractual se les conceda a todos los trabajadores universitarios, cuando debe ser sólo para los sindicalizados, explicó el huidizo líder.
“El año pasado, en ese rubro se nos otorgó la cantidad de dos mil 500 pesos, sin embargo, las autoridades universitarias quieren conceder menos de ese monto, cuando sabemos de buena fuente del área administrativa, que se cuenta con más de dos millones de pesos presupuestados para ese rubro”.
Al vencer el plazo de la prórroga anterior que se otorgó para el estallido de la huelga, “por primera vez se presentó ante el Centro de Conciliación Laboral la rectora Sandra Laffón Leal, para condicionar el pago de ese bono que se encuentra en el presupuesto de la Unacar, a cambio de no otorgar más jubilaciones, como corresponde, resaltó.
Magaña Martínez dijo que en ningún momento habrán de aceptar negociación alguna que atente contra los intereses de los trabajadores, más aún cuando se trata de su derecho a la jubilación merecida.
En un gesto de buena voluntad por parte del Sutunacar se concedió una nueva prórroga para el estallido de huelga –informó–, que concluye el 28 de junio, aunque se estima poder alcanzar un acuerdo antes de vencer- se ese plazo.
Sobre la manifestación realizada por integrantes de ese sindicato recientemente, mediante la cual se pedía su salida, Magaña Martínez remarcó que se informó en tiempo y forma, a través de los representantes sindicales en cada área, sobre las acciones que se realizan.
“Estamos a la espera de que se concluyan las negociaciones, que se elabore el documento final, para que sea presentado y aprobado en su caso, en una asamblea general, por los integrantes de ese gremio”.
De las acusaciones en su contra, donde es señalado de encubrir a la rectora, porque ambos tienen intereses partidistas, el dirigente declinó opinar, y prefirió decir que respalda a sus agremiados.
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