Tribuna Campeche

Diario Independiente

A fuego lento: ¿De parte de quién?

Ernesto Pastor Cruz Carranza

Es evidente que las cosas se han salido de control, no solamente desde las matinés de Palacio Nacional con un Andrés Manuel convertido en chivo en cristalería, sino también sus más lambiscones seguidores en su afán por tener una pasada de mano en la nuca, se quieren vestir de estoque y terminan con severas tormentas de cajeta con aroma visceral de Tepetitán.


Como ya es una sucia costumbre caligulesca, en Campeche los Martes del Jaguar es la función circense más ridícula en toda la historia de lo absurdo, que ni en tiempos de las frivolidades de Jolopo o los eventos ladinos de mansedumbre sin límites, “La diva del mal decir” se sublima para pretender hacer carcajear cual orate al “rayo” que sólo cae desde las inmensidades cósmicas e infinitas cada siglo, y convierte la noche negra en rito de santerías para adorar al “Peje de oro”, símbolo de la ratería, mentiras, traición, cinismo, misoginia, delincuencia, crímenes, impunidad y psicopatía peligrosa contra la salud constitucional de México.


La promoción del burlesque llevaría como estelar del programa un linchamiento de zahúrda para la senadora Xóchitl Gálvez Ruiz, quien está convertida en la nueva villana favorita de AMLO, y desde los astilleros se pone en duda sus orígenes indígenas en estudios profundos de ADN.


Mientras la arquitectura del “Fisgón” monero del Granma nacional mejor pagado por excretar trazos vulgares y corrientes que lo retratan cual es su podrida naturaleza, aseguran que la indigestión mental que Xóchitl ha generado con la torpeza del mánager-jugador, sería factor de violentar las elecciones del 2024, cuando la violencia, el chantaje, los vínculos con la delincuencia organizada y el terrorismo han sido la manera de actuar de toda la pandilla de Morena.


Todo parece indicar que desde la vieja casona de donceles-Segob la “Carta en la manga”, Luisa María Alcalde, por presunta orden directa de Claudia Sheinbaum, habrían parado en seco a la bestia campechana y drásticamente se elimina de la cartelera el linchamiento a Xóchitl Gálvez.


Mis informantes aseguran que la corcholata principal Claudita ya no busca cómo mandarla al rancho de Chiapas, pues los efectos negativos de sus revistas de arrabal están convertidos en su lastre, y de paso sus conflictos con Adán Augusto López golpean su relación con el brioso otoñal vampiro con hormonas primaverales.


Queda como único platillo del menú el diputado federal Pablo Angulo Briceño, presidente de la Comisión de la Auditoría Superior, a quien se busca iniciar golpeteo directo para frenarlo a mediano plazo, mientras se podrá seguir demostrando el nivel de alcantarillado del sobrino 100% campechano de cómo se hace carambola, haciendo feliz a la comadre con el corazón destrozado y de paso volver a chantajear para que nada impida el blindaje con fuero a Gerardo “Seso Loco” Sánchez Sansores y América Azar, pues lo peor se espera con malos augurios.


Los trabajos de los orubas y babas ifas antillanos al parecer están fallando de la cabeza a los pies, hasta con la madre del nieto por obra y gracia de Andy, que antes todos los martes ponía palomitas para disfrutar la revista y ahora le anexa entripados.


Los planes se desdibujan y ante el golpe sobre la mesa la apapachada ha tenido que cambiar drásticamente su sketch, y su presencia está siendo sumamente incómoda a pesar que se presume la inminente sustitución de Mario Delgado de Morena, a fin de que Laydita sea presentada durante el Quinto Informe de rapiña de AMLO en Campeche, para que siga la maldición interminable de la 4T.


Lo anterior, así se tenga que exigir a las Fuerzas Armadas acompañar un golpe de Estado contra la patria y nuestra Carta Magna, para imponer la dictadura de AMLO y gavilla apegada a los “acuerdos de río”.
¿La jaguar se desdibuja como las colas de yeso corriente de sus amuletos urbanos, mientras Cuitláhuac García Jiménez se encumbra como buitre por encima del Balán?

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