¿FUE INFORME O MARTES DE JAGUAR? Utilizando el largo y cansado formato del año pasado, en el cual medio informaron los miembros del gabinete y medio informó la gobernadora, con anuncios plagados de adjetivos rimbombantes de inversiones opacas, transcurrió el Segundo Informe de Gobierno de Layda Sansores. No hubo obra que presumir.
Como se esperaba, las ridiculeces de la mandataria fueron parte del orden del día. Iniciaron con sus ininteligibles frases en maya, su propuesta de matrimonio a su amante chiapaneco que prefirió guardar silencio, y culminaron con el show de la canción “súbete al tren”, interpretada por su sobrina y para la cual pararon a bailar al gabinete y a los asistentes, mientras se regodeaba la familia feliz.
Como cada martes de jaguar, no faltó el ataque al exgobernador Alejandro Moreno Cárdenas, porque “su mansión es un insulto al pueblo”, olvidando que su familia tiene no una, sino dos mansiones en Campeche producto del latrocinio de su padre. Cínica hasta la muerte. ¿Pensará que el campechano es ciego?
DECRECIMIENTO CON LAYDA. Felicitamos al equipo de redacción de TRIBUNA por su portada de ayer. Resumen resultados del Segundo Informe de Gobierno de José Antonio González Curi, Jorge Carlos Hurtado Valdez, Fernando Eutimio Ortega Bernés y Rafael Alejandro Moreno Cárdenas, los cuales no tienen comparación cuando se miden con los negativos retrocesos que acumula el de Layda Elena Sansores San Román. Para ponerle el cascabel al gato, se incluye un gráfico del Inegi de la actividad económica estatal, que confirma que la economía de Campeche decreció de -5 en 2021, a -6.58 en 2022 y a -14.4 por ciento en 2023. Su amistad con el presidente López Obrador no ayudó a revertir esta tendencia. Estamos peor que nunca.
Layda Sansores ha manejado mucho más recursos que sus antecesores, pero ha fracasado en desarrollo económico, salud, seguridad, educación, vivienda y empleo. Los constructores locales se quejan de que por la poca obra pública que se licita o asigna, les piden una mochada del 30%.
RIDÍCULAS CIFRAS DE TURISMO. El INAH, en su portal de internet, reporta 119,097 visitas a zonas arqueológicas y sitios históricos —la mayoría a Calakmul y Edzná— en este primer semestre, apenas 658 diarias. De acuerdo a los números en las redes de la gobernadora, solo el 20% de los turistas visitaría nuestros atractivos turísticos,
“Desde el 1er semestre del 2023, hemos recibido 610,071 visitantes; un crecimiento del 17.8% respecto al mismo periodo del año anterior y una derrama económica de 1,361 mdp,” publicó Layda Sansores. O sea, en promedio 3,370.56 visitantes diarios, cada uno de los cuales habría gastado 2,230.89 pesos durante su visita.
Suena bonito, pero ¿de dónde saca esas cifras? ¿Cuál es su fuente informativa? No lo precisa. Pero siendo objetivos, si consideramos que hay 8395 cuartos de hotel disponibles en el Estado, significa que los hoteleros trabajan apenas con un 40% de ocupación. Un porcentaje muy bajo, que a Layda le debería dar pena presumir, pues delata la poca promoción turística y precarios resultados de su gobierno.
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