Derivado de la falla en el motogenerador de la habitacional MG0101, desde hace cinco días unos 150 trabajadores petroleros del complejo Cayo Arcas, ubicado en la Sonda de Campeche, carecen de luz, agua y alimentos, sin que hasta el momento Pemex los auxilie.
De acuerdo a reportes en redes, el daño ocurrió el pasado 28 de agosto, y hasta el día de ayer no había sido reparado, y tampoco hay logística establecida para surtir el material que se necesita.
Por dicho fallo empezaron a faltar los suministros, entre ellos el agua potable, y al quedar sólo 400 litros para todos optaron por bañarse en zona de riesgo que carece de visibilidad.
En cuanto al “corte” de electricidad, los trabajadores se han visto obligados a dormir en las zonas de helipuerto y perimetral del complejo habitacional.
Por si fuera poco, la comida escasea y la cámara refrigeradora dejó de funcionar, propiciando que alimentos perecederos empiecen a descomponerse. El personal sobrevive comiendo una ración de alimento enlatado y un sándwich, lo que pone en riesgo su salud.
Otra agravante que causa desesperación es la falta de comunicación con sus familias, pues tampoco funciona el UPS, ante lo cual acusan que al parecer la situación no le preocupa a Pemex.
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