Payasada que Layda combate corrupción

VOTO Y EMBAJADA, SU “CAMISA DE FUERZA” PARA NO ENCARCELAR A AYSA

El combate a la corrupción que pregona la gobernadora Layda Sansores San Román es una payasada, pues un voto y una embajada son la “camisa de fuerza” que le pusieron para no encarcelar a su antecesor Carlos Miguel Aysa González, el exgobernador sustituto a quien acusó de corrupción pero que ahora cobija con el manto de la impunidad.

Afirmó lo anterior el secretario regional CEN del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Luis Alonso García Hernández, y sentenció: “No hay ningún combate frontal a la corrupción con Layda Sansores, lo que hay es un Gobierno autoritario y corrupto que se exhibe con una injusticia selectiva”.

El exdiputado local destacó que Layda Sansores usa el caso del ex alcalde de Champotón para blofear sobre su lucha anticorrupción que, sin embargo, resulta un engaño, una falacia, mientras el corrupto exgobernador Aysa González goza de impunidad y protección.

Recordó que cuando asumió el cargo, la hoy gobernadora aprovechaba cada oportunidad para denunciar la corrupción de Aysa González, en especial la de la Ciudad Administrativa, donde se habrían desviado más de mil millones de pesos.

Durante la emisión del Martes del Jaguar del 19 de octubre de 2022, Sansores San Román criticó a Aysa González por 13 asesores que costaban a los campechanos 32 millones de pesos al año.

En el noveno programa se ensañó con la hija de Aysa González, al denunciar que en el más reciente proceso electoral, Karla Aysa Nakasima siguió cobrando unos 90 mil pesos como jefa de la Oficina de la Presidencia del IEEC, pese a tener licencia por posible conflicto de interés.

“Los abyectos diputados de Morena, también se ceñían a su narrativa y llegaron a exigir que Aysa González fuera investigado y castigado por la corrupción en Ciudad Administrativa”.

Y en voz de la diputada Elisa Hernández, desde la tribuna del Congreso local enfatizaron: “En un acto sin precedentes, la gobernadora se presentó estoica, valiente, de frente, en búsqueda de la verdad ante los responsables de tal vez la obra más emblemática del pasado Gobierno del Estado y que pudiera ser uno de los más grandes desfalcos y engaños a costas del dinero de los campechanos”.

“Es la Ciudad Administrativa una obra con más preguntas que respuestas, en que imperan las irregularidades y las omisiones, los errores y los excesos, las que dan la pauta a presumir que el gran trasfondo es la corrupción”, apuntó.

Sin embargo, el linchamiento y el amago de denuncias penales contra el exgobernador interino, cambiaron diametralmente cuando el hijo de éste, Carlos Miguel Aysa Damas, igual que el papá, traicionó al PRI y votó con Morena a favor de la fallida reforma eléctrica de AMLO.

En la Cámara de Diputados. A Carlos Aysa Jr., el PRI le regaló la diputación federal plurinominal que hoy ostenta.

La belicosa perorata de Layda contra Aysa González terminó cuando el Presidente premió la traición al PRI del exgobernador, a quien propuso como embajador de México en República Dominicana.

En un santiamén, Aysa pasó de exgobernador corrupto a campechano distinguido, en el ánimo de la mandataria. “Es una distinción del Presidente para un campechano. Lo felicito, le deseamos éxito”, expresó cuando fue dada a conocer la propuesta presidencial.