Otra vez, el transporte

Paradójico que el titular de la Agencia Reguladora del Transporte, Jorge Luis López Gamboa, esté poniendo más obstáculos que alternativas de solución al caótico servicio de transporte público que existe…

La llegada del exdiputado local carmelita Jorge Luis López Gamboa como titular de la Agencia Reguladora del Transporte en el Estado de Campeche, ha traído más complicaciones que remedios al problema de movilidad humana en las principales zonas urbanas de la entidad.

Sin conocimiento en la materia, y como premio por su servilismo, entreguismo y rastrerismo en el Congreso del Estado, López Gamboa llegó para acrecentar la división que hay entre los prestadores de ese servicio en la entidad. 

No ha propuesto nada, no ha mejorado nada y sí pretende tener el control de todo el sector, más con fines recaudatorios, que de modernización de ese estratégico y vital servicio para la colectividad campechana.

Hay quien dice que no durará mucho tiempo en la Artec. Una porque está enemistado a muerte con el alcalde carmelita Pablo Gutiérrez Lazarus, y porque tiene el objetivo de descarrilar los proyectos que en este rubro tiene el edil para la Isla, principalmente su flotilla de camiones “Amor por Carmen”, sus Pochimóviles y su agrupación pirata de taxistas “Los Jaguares”.

Enfrascados en una medición de fuerzas, ni Pablo ni López Gamboa voltean a ver al ciudadano, que exige un mejor servicio de transporte colectivo. El primero pretende politizar esa demanda y anexarla a su desbocada precampaña, mientras que el segundo está como chivo en cristalería, destruyendo todo lo que encuentra a su paso.

Por eso es que se atrevió a desmentir al exconsejero jurídico de la gobernadora, el hoy candidato a una magistratura federal, Juan Pedro Alcudia Vázquez, quien declaró públicamente que ya podían operar las plataformas de servicio de transporte como Uber, Didi, Indrive y otras, pero el flamante director de la Artec lo desmintió.

Afirmó que aún hay un procedimiento que deben seguir las asociaciones y que hasta ahora ninguna empresa ha realizado el trámite necesario para su regulación, además que deben definirse los lineamientos y pagos correspondientes. En resumen, estamos igual o peor que antes.

En tanto, todos los días hay protestas por la pésima calidad del servicio, cuando hay, y el reclamo airado de colonos y ciudadanos porque en horas pico carecen de opciones para movilizarse en el transporte público.

Mientras eso sucede, el proyecto Ko’ox se fue a un bache antes de salir a las calles, y el Tren Ligero demuestra que su cualidad será la lentitud, pues avanza a paso de tortuga reumática. ¿Por qué la gobernadora no se refiere a esos temas torales para la sociedad campechana, en su programa de los martes? Sencillo, porque nunca se encuentra en Campeche y aún más, ya está empacando sus trajes de baño para sus inminentes vacaciones de Semana Santa.