FRACASÓ ROMERO EN PEMEX. Sintiéndose el sultán de Brunei, llegó a Campeche en avión particular hecho un fifí, el ensoberbecido director general de Petróleos Mexicanos (Pemex), Octavio Romero Oropeza —que no obtuvo su puesto por méritos sino gracias a su amistad con el Presidente—, y se pavoneó por el Congreso del Petró- leo como si estuviera entregando buenas cuentas.
Y con ese cinismo abrumador que transpiran los morenistas, calificó como un fracaso la reforma energética, porque Pemex produce el 97% de los hidrocarburos y el sector privado solamente el 3%. Alguien le debe recordar al ingeniero agrónomo que los cambios de humor del presidente Ló- pez Obrador se tradujeron en incertidumbre y ahuyentaron la inversión extranjera.
Muchos inversionistas entraron en pánico y retiraron su dinero cuando vieron que a un advenedizo inexperto como Romero Oropeza le confiaron la rienda de la paraestatal. Y no se equivocaron, los estados financieros de la empresa del Estado así lo confirman. Fracasó la reforma energé- tica porque no la supieron implementar. Entonces, ¿quiénes fracasaron?
PEMEX ESTÁ EN LA LONA. Como es costumbre morenista, los discursos se saturan de mentiras para ocultar el fracaso. En su conferencia “Fortaleciendo la industria petrolera para afianzar el futuro energético de México”, Romero Oropeza destacó que a nueve años de la implementación de la reforma energética de 2014, no ha dado buenos resultados. ¿Y cómo los iba a dar si el Gobierno de Ló- pez Obrador fustigó la inversión privada con la excusa de proteger la soberanía energética del país?
Tan fue así, que el mismo director general de Pemex
presumió los buenos resultados de “rescatar la actividad petrolera y la soberanía energética nacional”. ¿Cuál rescate? Le tuvo que inyectar Hacienda miles de millones de pesos para evitarle la quiebra, y ha sido incapaz de parar el masivo huachicoleo, pues la ordeña en ductos, centrales de carga y plataformas marinas es ya tan severa que sólo se puede concluir que el Estado esta coludido con los criminales en el saqueo.
Que responda Romero Oropeza ¿cómo fortaleció a Pemex y cómo afianzó el futuro energético de México? Porque la paraestatal sigue en picada. Urge que se vaya, junto con quienes lo impusieron. Han ocasionado un incalculable daño al país.
LAS MENTIRAS DE LAS REFINERÍAS. Decir que la meta es perforar un pozo diario para poder aumentar la producción, habla de que el futuro de Pemex está en el limbo, que se carece de certeza y que apelan a un milagro para encontrar otro Cantarell. Pero, si sabía Romero Oropeza que se necesitaba perforar, ¿por qué no dijo que invertir en la refinería de Dos Bocas era pésima decisión?
Muy vagamente Romero mencionó que se duplicó el proceso de crudo en las seis refinerías de México y estimó para finales de 2023 que la producción ascienda a 1.6 millones de barriles diarios en promedio, y para 2024 alcanzaría 1.85 millones de barriles diarios si opera a su máxima capacidad instalada la refinería de Dos Bocas. Note la condicionante.
Se ha publicado en diferentes reportajes que cuesta más barato comprar la gasolina que refinarla en México. Y sin embargo, se apuesta por una alternativa que tendría que trabajar a su máxima capacidad. ¿Quién habrá tomado tan mala y riesgosa decisión?
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