En las Tripas del Jaguar: 28 de Noviembre de 2022

HABLANDO DE POBREZA. La multimillonaria casi octogenaria gobernadora Sansores ha vivido toda su vida del erario público, y durante su travesía por diversas posiciones políticas jamás exigió justicia para Campeche. Por eso sorprende que ahora mande a “chingar a su madre” a los que nos dejaron en la pobreza.
Pero la respuesta le llegó enseguida y por varios frentes: “Pinche rata… devuelve lo que has robado… cinismo y desfachatez… chinguen a su madre usted y su familia… corruptos… renuncia y vete… ponte a trabajar…”. Si sólo el 10% aprueba su gestión, ¿qué esperaba?
Pero aclararemos que entre los presidentes responsables de esta pobreza, está Andrés Manuel López Obrador. En cuatro años no nos ha cumplido sus promesas de campaña —una refinería y traer las oficinas de Pemex—, y su Tren Maya nos rebajó de constructores a empleados de la construcción, pues la empresa de Carlos Slim es la que se lleva las ganancias de la obra.
¿Por qué ahora Sansores le mienta la madre a López Obrador? ¿Dejará de rendirle culto los martes? Ya que le preocupa la pobreza de los campechanos, un cibernauta le dejó esta pregunta: ¿por qué le quitó el trabajo a los campechanos y se los dio a foráneos?

LAMENTABLE GOBIERNO. La columna de Óscar Mario Beteta publicada el pasado 25 de noviembre en El Financiero, concluye con el siguiente comentario:
“Qué lamentable que la mayoría de los gobernadores, principalmente los que entraron en 2021 con la bandera de austeridad, honestidad y humildad de Morena, tengan una estructura de seguridad mayor que la del Presidente y hagan ostentación de ella tanto en actos oficiales como en su vida cotidiana. ¿Estará enterado su jefe?”.
Por si necesita precisar nombres de los aludidos, Layda Sansores es un claro ejemplo. Dice que su Gobierno es austero, pero el despilfarro de recursos para sus interminables viajes es enorme. Presume honestidad, pero se niega a transparentar el uso de los recursos públicos. Humildad nunca ha tenido, es soberbia, prepotente y ahora con fuero, viola la ley sin pudor. Y sí, está enterado su jefe.

ACOSA Y PERSIGUE. Francisco Garfias, en su columna Arsenal publicada en Excélsior el pasado viernes 25 de noviembre, relata la reacción que ha traído la campaña de acoso de Sansores a sus adversarios políticos.
“Un insólito movimiento de solidaridad con el senador Ricardo Monreal por la persecución y acoso de la gobernadora de Campeche, Layda Sansores, se registra ¡en la Cámara de Diputados! Más de 170 legisladores de distintas fracciones parlamentarias—entre ellos 55 morenistas— firmaron ya documentos de repudio a la utilización de recursos públicos para lanzar una campaña de desprestigio en contra de un legislador.
La gobernadora se ha pasado por el arco del triunfo la suspensión que un juez le otorgó al senador… Los posicionamientos de solidaridad… se plasman en tres documentos… Dice el de Morena… manifestamos nuestra solidaridad… ante un gobierno (el de Campeche) que utiliza de manera sistemática, ilegal e impune recursos públicos para fines de persecución y acoso”.
¿Los acusará de traidores a la patria? Compromete el nombre de nuestro Estado para satisfacer sus ambiciones políticas. Pero no es de aquí, y se largará apenas concluya su encomienda.