Tribuna Campeche

Diario Independiente

Denuncian locatarios “cacería” de Profeco

Permite el comercio clandestino de aves de corral en las colonias

Mientras personal de la Comisión para la Protección Contra Riesgos Sanitarios de Campeche (Copriscam) y la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) persiguen a comerciantes del mercado “Alonso Felipe de Andrade” (AFA), el ambulantaje hace de las suyas en colonias de la ciudad donde sin protocolos sanitarios y kilos incompletos venden aves de corral.


Así lo denunció Joaquín del Carmen Bolón Palma, comerciante de pollos en el centro de abasto, al indicar que esas dos dependencias federales les traen marcación con lupa.


“Aún cuando saben que quienes están en los locales mantienen la higiene y garantizan un precio justo a sus clientes, la persecución continúa”, abundó.


Debido al comercio ambulante de aves de corral y las “pollerías” en los hogares sin regulación, los locatarios del mercado ven con tristeza que sus ventas descienden de forma significativa en los últimos tres años.

Los vendedores del mercado “Alonso Felipe de Andrade” lamentan que sus ingresos han descendido en los últimos tres años.


“Hace más de cinco años se vendía mucho, no había competencia desleal. Existen vendedores de pollos procesados que se dedican al comercio informal como hoy en día en las calles de la ciudad”.
Llevan el pollo en bolsas de nylon y el producto muchas veces se contamina por el sol y el calor que genera la bolsa, esas personas han hecho que bajen las ventas del mercado.


“Tanto la Copriscam como la Profeco tienen consigna contra los comerciantes del mercado. Se vuelven más estrictos con quienes venden carnes rojas, revisando las básculas, que los sellos se encuentren verificados y la autoridad sanitaria exige locales estrictamente limpios y apegándose a la higiene para el manejo de alimentos”.


Con esa misma “vara” deben medir a quienes venden al interior de colonias tanto en sus casas como en triciclos. Todos sabemos que lo hacen sin ningún control sanitario, además esos comerciantes no pagan sus impuestos, no verifican si las básculas se encuentran calibradas para dar kilos completos.


“Este tema ha sido uno de los más manejados en las asambleas del Sindicato de Expendedores de Aves de Corral, por lo que hablaremos con la secretaria general de la organización, la profesora Rosa Campos, para ver qué se puede hacer al respecto”, puntualizó.

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